Alguien dijo una vez que Nueva York es como Kansas pero a lo bestia, ¿Y Chicago?, pues visto desde arriba también impresiona lo suyo, y eso que no ha sido la primera vez que teníamos la ciudad ahí abajo, vivir rodeados de rascacielos hace que de vez en cuando nos entren ganas de subirnos a alguno. Y eso hemos hecho hoy, después de que este clima tropical que padecemos últimamente, tormenta un día si y al otro también, nos haya dejado sin picnic y sin concierto en el parque. El plan B no ha sido tampoco mala opción.
Y una canción, a modo de pequeño homenaje, ya tengo una cosa menos de la que avergonzarme.
La verdad es que las cosas desde el otro lado del ADSL se ven muy diferentes, y muchísimo más altas. Cada segundo que pasa la ciudad del viento gana puntos y va gustando más, una pena que cada vez esté también el momento de marchar...
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