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jueves, 27 de mayo de 2010

BLUE DEVILS




Después de casi cinco meses por aquí, hoy ha sido la primera vez que he probado eso que venden como café en el DCAM y la experiencia no ha merecido la pena. Uno de mis grandes esfuerzos en este tiempo ha sido intentar conseguir en casa algo parecido al café al que estábamos acostumbrados, no nos quedan ya marcas que probar, ni sabores, ni procedencias, ni clases de tueste...y aún estoy lejos de dar con la fórmula mágica. Y mañana a catar de nuevo la purga, seguimos sin café en casa, vaya cabeza.

Hemos terminado la noche escuchando blues en un bar cutre, la música haciendo juego con el ánimo con el que acabamos el día. Triste.

Una canción, que no es un blues.

2 comentarios:

  1. Hola, no se porqué yo tenía la idea que el café no era una de tus bebidas predilectas, que te gustaba más el té. Mira que si vas a tener que ir hasta los "estates" para añorar el café.

    No obstante veremos que se puede hacer para remediarlo.

    Besos

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  2. Esa idea es del todo cierta, no me gusta en absoluto, lo tomo sólo por prescripción facultativa, para vencer las enormes ganas de quedarme en la cama cada mañana...y el agua sucia que nos venden por aquí no hace nada bien su función.

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