DEADLINES

Hoy acabo de darme cuenta de que llevo cerca de un mes peleándome con una base de datos cada vez más inabarcable, revisando decenas de historias clínicas, siguiéndole la pista a un montón de pacientes, buceando en el muy retorcido sistema informático del hospital, interpretando informes a veces indescifrables y haciendo números y cálculos con todo ello. Después intentando que la estadística le dé algo de sentido a todo el trabajo y últimamente tratando de escribirlo de una forma mínimamente entendible.

Y me acabo de dar cuenta porque mañana es el día en el que el esfuerzo de las últimas semanas le llegará al jefe en un archivo adjunto vía correo electrónico y ya solo quedará esperar al veredicto de los que mandan en el research meeting del próximo martes.

Y al darme cuenta de todo eso he pensado que no sé a que dedicaré el tiempo a partir del lunes, aunque enseguida he caído en la cantidad de cosas que aún me quedan por hacer. Y en las ganas que tengo de hacerlas.

La canción que nadie escucha.