MANONASH

Estando en A'dam me dio por repasar una vez más las aventuras y desventuras del Dr. Fleishman, ahora me ha vuelto a dar por lo mismo, no sé la razón. Alguna habrá, siempre la hay. Avisaré cuando llegue a Manonash.

Nos hemos levantado algo tarde, cosa extraña en Penélope, no sé si esta vez hubo ataque de insomnio de madrugada. Muffins de arándanos en el desayuno y después paseo hacia el norte con viento de cara y el lago a nuestro lado, tanto el viento como el lago completamente helados. Cerca de la calle de la pesadilla, donde no había ni rastro de Freddy, está el curioso Museum of Surgical Science, la entrada no era gratuita hoy pero gracias a mi carnet de la Universidad y a mi aspecto juvenil he pasado por estudiante, como hace años en Mamola pero al contrario. Con el truco he pagado cerca de la mitad que Penélope, que obviamente aparenta unos cuantos años más.

Tras bucear en la historia de la ciencia médica, a veces más interesante que la propia ciencia, pequeño recorrido por Gold Coast, probablemente el barrio más caro de la ciudad, con sus torres de apartamentos mirando al lago y sus tiendas caras, de esas sin precios en los escaparates. Ya de vuelta, nos hemos topado con el único supermercado de la ciudad donde hemos encontrado pan de verdad, Treasure Island, que tiene como eslogan America's most european supermarket, genial resumen de la cultura -e incultura- yankee, lo que habíamos visto hasta ahora era una especie de sucedáneo del pan de molde, blando y correoso. Gran descubrimiento junto al Fox&Obel de aquí al lado, donde gracias a los amigos calagurritanos ayer compramos unos estupendos boquerones en vinagre y unas puntitas de jamón para que B haga buenos caldos para reconfortar el espíritu en estos días de frío.

Y si ayer había pasado una semana más, hoy hace ya un mes que estamos aquí, luchando contra el viento, y parece que fue ayer.

Os dejo música.